El doctor Federico Ramón Prieto Celi actualmente es miembro del Consejo Directivo de EsSalud en representación de la Mediana Empresa. Es doctor en Derecho y Licenciado en Ciencias de la Información. Profesor universitario. Periodista en ejercicio en diferentes medios de comunicación. Especialista en temas educativos de salud pública. Consultor y Asesor en estrategias de comunicaciones y autor de diversos libros como “La Alternativa Democrática”, “El Deportado” y “La Autonomía Interna”, entre otros.
Esta semana publicó un artículo en un medio local en el cual analiza la situación actual del Seguro Social de Salud, EsSalud, el que difundimos debido a su trascendencia:
La doctora Virginia Baffigo de Pinillos asumió por segunda vez la Presidencia Ejecutiva de EsSalud desde setiembre del año pasado para darle eficiencia. El desafío es inmenso: las deficiencias encontradas son muchísimas. Es ilustrativo apuntar algunos obstáculos, ya que pocos los conocen.
1.- EsSalud es una institución tripartita: tres consejeros del Gobierno, tres de los empresarios y tres de los trabajadores en su directorio… pero no tiene autonomía económica, financiera, presupuestal, ni administrativa, funciona como cualquier ente estatal (municipalidad distrital, por ejemplo), sujeta a la boscosa normatividad burocrática, a pesar de que su ley de creación dice lo contrario (cfr. Ley 27048).
2.- Sus fondos y reservas son intangibles (art. 12° de la Constitución)… pero en la práctica EsSalud está controlada por el Sistema Nacional de Inversión Pública (SNIP) y el Fondo Nacional de Financiamiento de la Actividad Empresarial del Estado (Fonafe), es decir, por el MEF. Del Fonafe depende gracias a la 55° disposición complementaria final de la ley de presupuesto del sector público… para el año fiscal 2011, cuya vigencia terminó, por su naturaleza anual, el 31 de diciembre de ese año (aunque la disposición la proyecte al 2014). Aplicar hoy esa norma, como se sigue haciendo, es inconstitucional.
3.- Sunat debe recabar de los empresarios los aportes de cerca de diez millones de trabajadores formales. Cobra 1,4% de esa recaudación (cien millones de soles al año), a pesar de que el convenio con EsSalud señala que debe cobrar 1%.
4.- Sunat ha dejado de cobrar 4.026 millones de soles a irresponsables entidades públicas y reticentes empresas privadas. (Las AFP encargan esa tarea a empresas especializadas, que cobran a todos, haciendo a su costo muchas miles de cobranzas judiciales, cosa que la Sunat no hace).
5.- El Parlamento tiene algunos congresistas capaces, pero es colectivamente incompetente, como acabamos de ver en la repartija. Demagógicamente, legisló que EsSalud no reciba los aportes de las gratificaciones de julio y diciembre, por lo que el Consejo Directivo de esa entidad usó el fondo de contingencia para cubrir el déficit de su presupuesto de ese año… que el nuevo Consejo Directivo tuvo que reconstruir, con enorme detrimento de sus proyectos de inversión. El problema subsiste: en la delegación de poderes al Ejecutivo se incluye la prohibición de devolver a EsSalud el derecho de cobrar esos aportes.
6.- EsSalud depende del Ministerio de Trabajo, que le ha preparado un proyecto de reforma… dejándolo dependiente del gobierno central.
7.- EsSalud se encontró con cerca de 12.000 operaciones quirúrgicas embalsadas, al 31 de diciembre del año pasado; 10.409 a mayo del 2013. La institución intenta terminar el desembalse el 31 de diciembre, pero la proyección hace difícil alcanzar esta meta… con un déficit de 5.750 médicos (c/u atiende pacientes solo 4 horas diarias), sin contar el de técnicos, enfermeras, exámenes auxiliares, quirófanos, etcétera.
8.- El deseo de hacer asociaciones público-privadas (APP) existe, pero se han concretado muy pocas, por resistencia burocrática.
9.- EsSalud tiene que lidiar con 18 sindicatos. ¿Se imaginan? Anuncian un paro para el 7 y 8 de agosto. ¿Sigo?