Un gesto de amor permitió que un joven agricultor natural de Oxapampa (Pasco), tuviera una segunda oportunidad en la vida al recibir un riñón de su propio hermano, luego de someterse a un exitoso trasplante en el Hospital Nacional Ramiro Prialé de EsSalud en Junín.
Esta conmovedora historia ocurrió en EsSalud, en la que Cristian Ortega Arrieta, de 28 años, decide donarle uno de sus riñones a su hermano Jhony, de 25 años, quien fue diagnosticado de hipertensión arterial juvenil, que le ocasionó una insuficiencia renal crónica terminal, es decir sus riñones no funcionaban y necesitaba con urgencia un trasplante para sobrevivir.
El muchacho ya no podía con las náuseas, estuvo hasta 3 días sin poder comer. Los médicos le dijeron que requería de un trasplante de riñón urgente, su hermano Cristian conmovido se sometió decidió a realizarse las pruebas de compatibilidad, que resultaron positivos
La operación estuvo a cargo del médico Félix Ortega Alvarez, jefe de trasplante del Hospital Ramiro Prialé de EsSalud junto a un grupo de 15 profesionales en promedio, entre anestesiólogos, enfermeras y técnicos. Todo salió muy bien y ahora los protagonistas de esta historia se recuperan satisfactoriamente. El donante, ya fue dado de alta; mientras que Jhony volverá a casa en unos días.
El doctor Félix Ortega, explicó que el trasplante se hizo a través de cirugía laparoscópica, que tiene múltiples ventajas: en el caso del donante, la incisión es mucho más pequeña; menos dolor y recuperación más rápida. Para el implante del órgano se realiza una incisión de 12 centímetros en el receptor.
La operación a la que sometieron a los hermanos Ortega Arrieta, es una moderna técnica de cirugía laparóscopica para trasplante de riñón. Es la segunda vez que se realiza en Huancayo con éxito al 100%.
Jhony recuerda que antes de la operación el malestar, náuseas, vómitos y mareos empeoraban. “Fue muy difícil, teníamos la esperanza en un donante fallecido, hasta nos hablaron del trasplante con donante vivo y mi hermano Cristian acepto”, comentó.
Cristian, por su parte, dijo que su decisión no fue difícil, ya que quiere mucho a su hermano menor.
“Toda persona tiene un propósito en la vida y el mío fue darle una segunda oportunidad al ser que quiero. Somos una familia y como tal debemos apoyarnos”, dijo emocionado.
La decisión de donar fue fácil, genéticamente ambos hermanos son compatibles en un 90%, situación que facilitó la intervención de alta complejidad.
Dato:
Existen 6 pacientes en lista de espera para trasplante con donante vivo.
