Si bien es cierto que el consumo masivo de pescado está ligado principalmente a la tradicional celebración de la Semana Santa, las virtudes alimenticias y saludables que ofrece el mar deberían de tener mayor presencia en la mesa familiar.
Según el nutricionista de EsSalud, Marco Taboada García, el consumo de pescado se debe realizar por lo menos tres veces por semana para proteger el sistema cardiovascular.
“Es conocido que el consumo de pescado aporta proteínas de gran calidad nutricional, vitaminas y minerales. Lo que pocos saben es que el consumo habitual de pescado se ha relacionado con un menor riesgo de muerte por enfermedades cardiovasculares, reduciendo el riesgo de infarto de corazón, de depresión y de demencia senil o alzheimer”, señaló Taboada García.
Precisó que gracias a que aporta ácidos grasos como el Omega-3, contribuye al buen funcionamiento del corazón y de los sistemas nervioso y circulatorio. De allí su efecto preventivo.
Asimismo, destacó que el pescado es un alimento de fácil digestión y que permite múltiples preparaciones de acuerdo a los gustos personales, por lo que su consumo debe ser parte de una dieta.
En tanto, el doctor Alberto Quintanilla Valentín, endocrinólogo del Centro de Atención Integral de Diabetes e Hipertensión (CEDHI) de EsSalud, señaló que el pescado aporta vitaminas tan importantes como la vitamina D, que tiene un efecto protector para la Diabetes tipo 1 y probablemente también contra la Diabetes tipo 2. Esta vitamina lo podemos encontrar en los pescados de carne oscura como anchoveta, bonito y jurel.
Finalmente, el doctor Quintanilla Valentín, aconsejó que en estos días feriados, aparte de consumir pescado, debemos aprovecharlos en promover en nuestras familias actividades sanas y saludables como caminatas, ciclismo, ejercicios al aire libre. “La Asociación Americana del Corazón recomienda que el ejercicio debe ser una actividad voluntaria y frecuente no solo por estos días sino permanentemente, por lo menos 30 minutos al día y cinco veces por semana” acotó.