Con el objetivo de incrementar el número de donantes voluntarios e incentivar en la opinión pública la importancia de la donación voluntaria de sangre, el Centro de Hemoterapia del Hospital Nacional Ramiro Prialé Prialé de EsSalud Junín, en coordinación con la Escuela de Tecnología Médica de la especialidad de Laboratorio Clínico y Anatomía Patológica de la Universidad Peruana Los Andes, realizó una campaña de donación voluntaria de sangre.
La actividad se realizó en la explanada de la universidad huancaína, donde se instalaron las carpas de EsSalud Junín y se brindó atención medica informativa y de recepción para las donaciones voluntarias.
En la campaña, se captó 120 unidades de sangre y tuvo la aceptación de los estudiantes y trabajadores de la casa de estudios. Los jóvenes universitarios se organizaron y desarrollaron una serie de actividades para sensibilizar a la población, mediante sorteos de presentes, concursos y bailes típicos. Recalcando la importancia de la donación voluntaria.
El jefe del Centro de Hemoterapia, doctor Julio Troncoso, manifestó que, la campaña de captación de sangre estuvo supervisada bajo las normas de bioseguridad establecidas de acuerdo a Ley, para cuidar la salud del donante y del receptor. Además, paralelamente se realizó a cada donante siete pruebas de tamizaje de sangre, las de VIH, sífilis, hepatitis B y C, chagas, HTLB 1 y 2.
También, el funcionario felicitó la promulgación de la Ley N° 309870, que promueve la sensibilización de la donación voluntaria de sangre en la educación básica regular, para así incorporar en la Ley General de Educación el principio de la cultura de donación voluntaria de sangre, como mecanismo para promover los valores de solidaridad.
Para donar sangre se debe tener entre los 18 y 55 años de edad, tener un peso mayor o igual a 55 kilos y gozar de buena salud. Los que deseen ser donantes voluntarios pueden acercarse al Centro de Hemoterapia Tipo II del Hospital Nacional Ramiro Prialé Prialé de EsSalud Junín.
Es importante recordar, que todos los días, numerosas personas necesitan sangre, como las mujeres gestantes con hemorragias durante el parto, víctimas de accidentes de tránsito, enfermos con cáncer, quemados y hemofílicos. La falta de sangre es un grave riesgo ante catástrofes, por los que los establecimientos de salud deben garantizar el stock y las demandas en situaciones de emergencia.
