El Seguro Social de Salud, EsSalud, advirtió que Independientemente de la fecha de caducidad, un medicamento jamás debe ser administrado ni consumido si usted nota que ha cambiado de color o consistencia, porque podría estar comprometiendo su vida.
Por este motivo, recomendó poner especial atención en la conservación de las medicinas, sobre todo en el verano, época en la que el calor puede afectar a algunos medicamentos que son más sensibles a las altas temperaturas (como cremas, supositorios, insulina, vacunas, nitroglicerina, preparados farmacéuticos magistrales y extemporáneos, entre otros) modificando sus propiedades e inclusive sus efectos.
“Algunos de estos medicamentos como la insulina o eritropoyetina, deben conservarse en la refrigeradora (no congeladora), colocados en espacios separados e independiente de otros productos y otros como los supositorios y fórmulas magistrales o algunas gotas oftálmicas, podrían también guardarse según lo que indique el químico farmacéutico, retirándolos minutos antes de su uso para atemperarlo”, advirtió el químico farmacéutico Mario Viñas Veliz, jefe del Departamento de Farmacia del Hospital Nacional Edgardo Rebagliati Martins.
Según EsSalud, el mejor envase para conservar un medicamento es el diseñado por el fabricante; en ese sentido indicó que si bien es preferible no extraer las pastillas de su empaque original, se puede hacer una excepción en el caso de los adultos mayores pues, para ellos las cajas de medicación son recomendables porque les permiten organizar sus medicinas; sin embargo esta es una práctica que debería ser semanal para evitar exponer las tabletas al medio ambiente por mucho tiempo y teniendo cuidado en la identificación de cada uno de los medicamentos a tomar.
Además, se debe tener en cuenta que los que las cajas de medicación deben conservarse en un ambiente fresco y seco, descartando maletas, bolsas, mochilas, en el auto o cualquier espacio con alta concentración de calor o espacios como los botiquines en el baño de la casa.
EsSalud le recuerda además que como norma general, los medicamentos deben ser consumidos solo con prescripción médica y en ningún caso se deben suspender los tratamientos establecidos por su médico tratante, a no ser que presente alguna reacción adversa, la misma que debe ser consultada con su especialista.
De esta manera, el Seguro Social de Salud, promueve el cuidado y prevención de la salud en el marco de la política de humanización de los servicios en beneficio de los asegurados.