Mujeres y adolescentes son los más vulnerables en la búsqueda del cuerpo perfecto

Seguir los patrones de la moda puede alteran la salud de las personas

Cada vez con mayor frecuencia, las personas tenemos una imagen distorsionada de lo que es un peso normal porque vivimos bombardeados de imágenes corporales que asocian la juventud y la delgadez con belleza y que promueven juguetes y modelos de moda que transmiten el erróneo ideal de una delgadez extrema como el “peso ideal”.

 

La nutricionista del Hospital Nacional Edgardo Rebagliati Martins de EsSalud, Miluska Montalvo Moreno, enfatiza que los grupos más vulnerables en esta búsqueda son las mujeres y los adolescentes. “No alcanzar el cuerpo perfecto puede ser motivo de infelicidad e impactar negativamente en la calidad de vida. Con el paso de los años, las mujeres buscan mantener su juventud y delgadez en un intento de desafiar a la evolución normal del proceso de envejecimiento”, agregó

 

La permanente exposición de conceptos equivocados en la vida diaria puede contribuir a trastornos del comportamiento alimentario y a la distorsión de nuestro peso corporal normal. Esta realidad se palpa en muñecos con cuerpos cada vez más delgados e irreales, “realities” televisivos con cambios de imagen o modelos de pasarela delgados hasta lo imposible.

 

“Actualmente, la obsesión por la delgadez viene acompañada de regímenes dietéticos inadecuados, trastornos del comportamiento alimentario, realización de ejercicios de manera compulsiva, insatisfacción con el propio cuerpo y sentimientos de culpabilidad o vergüenza”, advierte la nutricionista.

 

Si bien es cierto, el Perú es un país donde existe tendencia al sobrepeso y va, trayendo graves consecuencias sobre la salud de las personas porque se incrementa el riesgo de hipertensión arterial, infartos cardiacos, derrames cerebrales, diabetes, enfermedades de la vesícula biliar, artrosis y otros tipos de cánceres, también debemos considerar que aumentan los desórdenes alimenticios producto de una autoimagen distorsionada.

 

Frente a esta situación urge estimular hábitos saludables de vida. “Debemos tener presente que las personas con exceso de peso que realizan ejercicio físico de forma habitual pueden presentar menos riesgo de padecer enfermedades del corazón o cáncer que las personas sedentarias con peso normal”, indicó la especialista.

 

Por ello, recomendó una alimentación saludable con cinco raciones de fruta y dos de ensaladas al día, tres  de pescado sancochado a la semana, dos litros de líquido diario y realizar actividad física 30  minutos diarios o una hora de manera interdiaria.

 

Asimismo, exhortó a la población a tomar conciencia de que verse bien no debe reflejarse de manera extrema en nuestra vida cotidiana y afectar nuestra salud. “Un peso saludable se encuentra condicionado a las características particulares de cada individuo”, finalizó.

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