A Trinidad Mendoza Trujillano, una asegurada de 64 años de edad, le cambió la vida hace ocho años cuando se enteró que padecía de cirrosis hepática, una enfermedad que se complicó hace cinco meses, cuando le hallaron un tumor maligno en el hígado. ¿La solución definitiva? El trasplante de este órgano.
Sólo un milagro la salvaría. Y éste le fue concedido la madrugada del 3 de marzo, luego de permanecer tres meses en una lista de espera, cuando un equipo multidisciplinario que fue liderado por el doctor Félix Carrasco Mascaro, cirujano hepatobiliar y trasplantador del Hospital Nacional Edgardo Rebagliati Martins de EsSalud, le trasplantó un nuevo hígado.
“Sentía mucho cansancio, retenía líquidos, tenía fiebre, perdí peso y limitación para trabajar, a lo cual se sumó la angustia de haberme descubierto un tumor maligno que ponía en riesgo mi vida, por lo cual debía trasplantarme pronto y estaba en carrera contra el tiempo hasta que se pudiera conseguir un donante”, rememora la señora Trinidad.
Después del trasplante me siento una mujer nueva porque “me estoy recuperando bastante rápido, cada día es una nueva oportunidad porque siento que he vuelto a nacer y miro optimista hacia el futuro”, nos cuenta.
Cabe señalar que la cirrosis hepática es la consecuencia de una enfermedad crónica sobre el hígado que ocasiona su deterioro de manera progresiva e irreversible en dos aspectos: uno estructural (que genera cicatrices o fibrosis extensa del hígado) y otro funcional (que altera severamente las funciones vitales de este órgano).
”Según las estadísticas, alrededor de un tercio de pacientes con cirrosis hepática pueden desarrollar cáncer de hígado en algún momento de su vida, tal como sucedió con la paciente, una enfermedad que pone en riesgo su vida”, explicó el doctor Carrasco.
Es necesario resaltar que este tipo de cirugías son posibles gracias, no solo a la tecnología de punta y a la capacidad médica que ofrece la Seguridad Social, sino a la solidaridad de familias que se sobreponen al dolor y en una muestra de amor al prójimo, deciden que la vida de su ser querido se puede prolongar en otras personas.
La donación de órganos y tejidos está regulada por la Ley de Trasplante de Órganos y Tejidos (Ley N° 28189) considerando que el trasplante es la mejor alternativa de tratamiento para algunos pacientes con enfermedad crónica terminal y muchas veces la única alternativa para prolongar su vida.
El doctor Carrasco finalizó explicando que este es vigésimo segundo trasplante de hígado que realiza el hospital Rebagliati y forma parte del 90% de los trasplantes de órganos que EsSalud realiza en el país.
